Not on a school night!

Todos hicimos un pagadios alguna vez en la vida. El mio resulto ser en Londres, hace alrededor de tres años.

Era un miercoles y mi compañera de trabajo Chloe, recien llegada a la capital, me invito a un bar a ver tocar una banda de argentinos que una de sus amigas conocia. Las tres nos juntamos en Liverpool Street y fuimos caminando hacia Spitalfields Market.

Pedimos comida, una botella de tinto frances y cerveza, ya que Chloe no tomaba vino. Al terminar nos dimos cuenta de que se estaba haciendo tarde, asi que llamamos a la camarera pero nadie venia; hasta nos paramos frente a la barra y aun asi nadie nos cobraba... entonces no quedo otra que irnos a ver el recital.

Ya en el piso de arriba pedimos una botella mas de vino y mas cervezas, aprovechando que lo anterior habia sido gratarola. Claire me invito esta vez, asi que le dije que "la proxima la pagaba yo". La segunda botella no duro mucho y ella insistio con que la proxima era esa noche, aunque yo hubiera preferido devolverle la atencion en otro momento, ya que con una botella encima estaba hecha.

De la banda en si y su musica mucho no me acuerdo. Lo que si recuerdo fue que Chloe y yo nos fuimos pasadas las 11 y estabamos cantando y hablando del ultimo tramo del sistema digestivo camino al tube. Nos despedimos con un beso y un abrazo cosa que, teniendo en cuenta que ella es inglesa, era demasiada efusividad etilica. Yo me tome mi Central Line a casa y ella partio hacia el otro lado.

Durante el trayecto senti que todo el vagon me estaba mirando porque estaba en pedo y, en cuanto el tren salio a la superficie, lo llame a Glen para avisarle que estaba en camino. Al llegar a Snaresbrook me fui caminando tranquilita y esa cuadra que tenia a casa parecio mas larga en zig zag. Cuando llegue el santo me habia dejado una botella de agua en la mesa de luz porque sabia que la iba a necesitar, y me miro sacarme los lentes de contacto dos veces.

La suerte de Chloe fue diferente ya que se durmio la mona en el tube, se paso y termino en Uxbridge, al final de la linea, en el ultimo tren... teniendo que compartir un taxi con un desconocido para volver a su casa. La jodita le salio £40!

Al otro dia estaba dandole con ganas al Alka-Seltzer y nada de proof reading para nosotras dos! Que esto me sirva de moraleja para no volver a hacerlo... at least not on a school night.