The tables have turned

Me llevo mucho tiempo sentirme a gusto en mi nuevo rol. Creo que recien hace unas tres semanas pude organizarme como quiero y ver como las piezas encajan de a poco. Siento que finalmente soy productiva otra vez, despues de meses fuera de la oficina por diferentes motivos.

No tener un equipo de 25 a cargo es un alivio, pero la persona que me quedo me estuvo sacando canas verdes desde el principio, con sus ausencias y faltas de respeto frecuentes. Se que no esta contenta con su trabajo pero mis muchos intentos de hacerla sentir a gusto y hablar con ella fueron en vano.

Ayer presento su renuncia mi unica subordinada. Por un lado me alegre, pero cuando supe sus motivos me senti muy identificada. Hace un año que esta en la empresa, y en ese tiempo recibio un ascenso. Le prometieron que seria la entrenadora, pero meses mas tarde se dieron cuenta de que la calidad de su trabajo no era tan alta como esperaron, por lo que retiraron la oferta y publicaron el cargo. Ella no se preocupo por postularse, y semanas mas tarde combinaron el cargo de Gerente de Calidad con el de entrenadora y me lo dieron a mi.

Si bien yo me esmere para conseguirlo, mi logro no solo le recalco que la promesa nunca se iba a cumplir, sino que ademas la nueva era ahora su jefa. No justifico que a veces sea inmadura y poco profesional, pero hasta cierto punto entiendo por que se siente tan desvalorizada y perdio la confianza en la empresa.

Anoche cuando llegue a casa y le conte a Glen recorde como me senti yo hace casi dos años, cuando un trabajo que tenia mi nombre se esfumo frente a mis propios ojos. Peteada de por medio o no, amiga o no, ahora soy yo la que le robe el cargo a alguien mas.

Me gustaria poder invitarla a tomar un cafe, hablar con ella mas alla de puestos y rencores y decirle que la entiendo... pero no va a poder ser. Ojala el tiempo le de otra oportunidad y trabaje duro para merecerla.