Friday, November 06, 2009

"This is the last time I abandon you"... or is it the first?

El momento tan temido tenia que llegar: despues de haber sido inseparables durante siete semanas y dos dias, Inés y yo nos despedimos por unas horas...


Todo empezo cuando Anna, una de las chicas del curso preparto, dijo que tenian dos entradas de mas para el recital de Muse en Liverpool. Despues de haberlos visto hace tres años en Manchester e insistir con lo buenos que son en vivo, Glen y yo habiamos hablado de ir pero las entradas estaban agotadas. Cuando la oportunidad se presento de repente decidimos no dejarla pasar.

Ya estaba todo listo: mis suegros iban a venir a casa, yo les iba a explicar como es nuestra rutina (o la ausencia de una...) y les iba a dejar leche mia en la heladera y el freezer por si mi niña estaba muy hambrienta. Hasta practicamos dandole una mamadera de mi leche para ver si se acostumbraba a recibirla artificialmente.

Me costo ajustarme a la idea de separarnos, pero sabia que en manos de sus abuelos iba a estar bien: ellos tuvieron dos hijos y siempre estuvieron presentes, ayudando con la crianza de Sam.

El plan estaba funcionando a la perfeccion hasta que mi cuñada llego de sus vacaciones el sabado pasado, y al dia siguiente diagnosticaron a Sam y a mi cuñado: la gripe porcina llego a nuestra familia*! Como mis suegros estuvieron en contacto con los afectados (por suerte nosotros no los vimos desde su regreso) decidimos que era mejor evitar a toda la familia hasta que pase la tormenta.

De repente teniamos dos entradas para un recital al que no ibamos a poder ir, asi que las ofreci en Facebook y mi amiga finlandesa, al ver que no podiamos ir porque no teniamos babysitter, se ofrecio a cuidar a Inés. Madre de un nene de cuatro años y otro de tres meses, a 10 minutos de casa y enfermera especializada en pediatria, me parecio alguien de confianza. Lo consulte con Glen y estabamos de acuerdo: de un dia para el otro Inés no solo no iba a estar conmigo sino que ademas iba a pasar parte de la noche fuera de casa!

Los preparativos fueron casi eternos pero lo logramos, y con un poquitin de culpa la pasamos bien y todo.

El recital en si nos dejo un sabor agridulce, ya que para cuando llegamos, a eso de las 20:45, ya habian tocado cuatro canciones de un total de 20. Que paso con el grupo soporte?! A las 10 de la noche se despidieron y las luces del estadio se encendieron, pero antes de irse me dejaron una de mis canciones favoritas, Stockholm Syndrome:


Fue un gran evento para nosotros dos y Anna y Andrew**, la otra pareja, ya que ellos tampoco habian dejado a James antes. Por unos minutos hasta senti que eramos dos solos otra vez... pero mis jeans de maternidad, los kilos de mas y la foto de una nena linda en mi movil me recordaron que somos una familia de tres.

* Hoy les dieron el alta, por suerte.
** Curiosamente, un ex compañero del secundario de Glen con quien coincidimos de casualidad en el curso.

4 comments:

Mariana said...

La primera separacion me parece que es mas dura para las madres que nos vamos con culpa y atormentadas, mas que par los niños que por lo general duermen! aajajaj
Pero hay que dar el paso...sino uno se encierra en el cocoon y no salis mas. Bien ahi...
QUe se recupere la flia che... haceles ole...vade retro y demases

Cynthia said...

Guau mirá como te animaste Ceci. Es todo un tema la primera separación (como dice Marian), igual la culpa de dejarlos siempre estaré presente!
Bien por los tres y copada tu amiga filandesa.

El Mostro said...

Me alegro que estén mejor. Yo ya estoy del otro lado, no veo la hora que se vayan los dos que me quedan.

Saludos desde la ciudad de la furia.

Anonymous said...

Verás que con el tiempo irás sintiendo menos culpa :-)