Busy bee

Esta semana estuve mas ocupada que en todo el ultimo mes junto. No se si me agarro la energia del final del embarazo o fue una cuestion de esforzarme por hacer todo lo que me queda y cumplir con mis compromisos, pero de alguna manera logre hacer mas que estar recostada en el sofa mirando TV y comiendo galletitas.

El viernes me junte con una colega finlandesa que esta 10 dias mas avanzada que yo, y juntas hicimos "cosas de embarazadas" (como almorzar, comer cosas ricas y comprar cosas para llevar al hospital). Camino a mi casa me di cuenta de que cinco horas de calle hacen que mis pies parezcan empanadas, pero a esta altura ya es normal.

Lo que no es normal es que me ponga a pintar y ayudarle a Glen con el empapelado. Pero el cuarto de Poro me estaba poniendo nerviosa y, a pocas semanas de su llegada, queria que mi bebe tenga donde dormir la siesta y guardar sus cositas. Asi que pele empapelado, endui, lije, agarre rodillos y pinceles y trabaje casi a la par de mi querido novio. Fueron dias largos pero el martes vimos los frutos con una sonrisa. Ahora solo nos falta la cajonera que teniamos en mente, pero armamos la cunita y todo. El primer dormitorio de Poro y el resultado del esfuerzo de sus papis, como no vamos a estar orgullosos?

El miercoles llego una amiga de Argentina, de gira por Liverpool con su hija adolescente que, curiosamente, es fan de los Beatles. Hacia alrededor de siete años que no nos veniamos, pero con las amistades de Argentina me pasa que siento que el tiempo no pasa... y de aquellos almuerzos en Galerias Pacifico a caminar por Liverpool One buscando una merceria fue solo un suspiro.

Paseamos bastante y cuando llegue a mi casa me di cuenta de que no estoy para estos trotes ni a palos, pero la pase bien. Ayer me tome los compromisos sociales con mas calma y me movi en auto. Las lleve a Penny Lane y Strawberry Field, con una visita fugaz a las catedrales como para que las vean al menos de afuera. Despues nos juntamos con Glen y cenamos en Wagamama antes de ir al Cavern a ver musica en vivo.

Pensar que cuando Gabriela me conto de sus planes ni sabia si iba a estar viviendo en esta ciudad, y cuando me confirmo la fecha no sabia tampoco si estaria en condiciones de hacer mucho... pero lo logramos, aun estando ya en el noveno mes.

Desde que estoy en casa de licencia me pude relajar y, si bien estoy agotada, me siento mucho mejor. Duermo poco de noche pero compenso con siestas durante el dia, me doy baños de burbujas casi a diario y, de no ser por el sindrome del tunel carpiano, estaria genial. Ahora me voy a dedicar a disfrutar de la calma antes de la tormenta y esperar que llegue el primer dia del resto de nuestra vida!