La noche empezo bien, con amigos y cerveza en el Porterhouse. A 11 meses de mi ultima vez en Londres, caminar por Covent Garden como lo hacia tan a menudo me lleno de emocion y nostalgia. Recordaba mis almuerzos haciendo compras y mis salidas con la gente del trabajo y Glen. Casi cuatro años atras fui a esa cerveceria por primera vez con mi novio y volvimos varias veces, juntos. Esta vez me faltaba
algo pero iba con amigos.
Bea y yo nos retrasamos y aparecimos media hora tarde para llegar
fashionably late. Ahi nos esperaban conocidos y caras nuevas, en su mayoria compatriotas. Volvi a ver a Marcelo y Elena y conoci en persona a Nico, Gra y Robin, con quienes la pase muy bien charlando, como si nos conocieramos de siempre.
Luego de unas pintas aprovechamos las entradas gratis y partimos hacia Roadhouse a eso de las 9:45. Para este entonces eramos solo tres: Nico, Bea y yo. Ahi bailamos, cantamos y saltamos al compas de la banda de covers que tocaba temas de Franz Ferdinand, Arctic Monkeys, U2, Coldplay y Blur, entre otros. Si bien es probablemente el boliche mas grasa de WC2, nos estabamos divirtiendo como supuse que lo hariamos.
Bea afirmaba que sus shots "estaban rebajados" y Nico y yo nos reiamos mas aun. En eso le digo a Bea "tirate para atras que yo te tengo", en nuestro afan de hacer "la gran Christina*", como ella describio mas tarde. Entre el envion y nuestro estado, que, ironicamente, no era tan grave como suena, me fallaron los reflejos y nos caimos las dos al piso. Entre risas nos levantamos y vimos que habia pasado.
Sangre. Rojo oscuro, casi bordo. Gotas gordas que brotaban sin cesar. Bea se habia golpeado la cabeza y, en camara lenta, acerco su mano al lugar donde le dolia porque supuso lo peor. Pero era mia.
En la caida, ella se fue de espalda y yo de frente, dandome la cara contra el piso del boliche. La sangre salia principalmente de mis orificios nasales, pero tambien tenia un corte debajo del ojo derecho y otro en el puente de la nariz.
Mi top blanco, mis jeans y hasta mi cartera estaban manchados. Ver tanta sangre me hizo asustar, aunque en ese momento no sentia mucho dolor. Era mas el shock que otra cosa.
Unos tipos de seguridad nos llevaron por una puerta y me dieron primeros auxilios. Con toallas de papel trataron de detener mi hemorragia y me dieron hielo para mi chichon. Me dijeron que me lavara la cara y los brazos, que estaban cubiertos de sangre. Cuando me vi en el espejo del baño me senti peor que antes: por primera vez me di cuenta de la gravedad del asunto.
Llenaron un libro de accidentes con mis datos y los acontecimientos. Cuando la sangre paro nos fuimos. Nico nos acompaño a tomar un taxi que le
robe a un par de rubias al grito de "Uds no estan sangrando, yo si!". Llame a Glen y le conte de los hechos. Esta mañana le mande un mensaje con una foto de su novia
tan bella como para que no asuste al verme... y me reconozca!
Por suerte no me rompi la nariz. Tampoco llegue a tener problemas con mis lentes de contacto, ni habia vidrios rotos en el piso... podria haber sido peor. Mi primera reaccion fue "no tomo nunca mas", pero despues de mucha culpa me di cuenta de que podria haberle pasado a cualquiera. No es la primera vez que me cai bailando y seguramente no sera la ultima.
Parece que un boxeador zurdo se hubiera desquitado con mi cara, porque todas las heridas estan del lado derecho. Al final, por hacerme la
Esmeralda termine como
Quasimodo!
* Aguilera.